Cinco consejos para afrontar la vida cotidiana durante el tratamiento contra el cáncer
Enfrentarse a las numerosas dificultades que conlleva el tratamiento contra el cáncer puede ser abrumador. Y, si bien el camino que queda por recorrer puede estar lleno de incertidumbres, hay estrategias que puede aplicar para hacer que cada día sea un poco más fácil.
Estos son 5 consejos que pueden ser útiles, incluso en los momentos más difíciles.
1. Prevea el cambio
Puede que sienta un alivio de, al fin, empezar a tratar el cáncer. Pero el recorrido de cada persona es único. Y es natural que haya cambios en lo que piensa. Puede que haya días en los que se sienta positivo y con esperanzas, y otros días pueden ser más difíciles. Sea amable con usted. No juzgue sus sentimientos cuando surjan.
Es posible que también cambien sus funciones y responsabilidades en la familia, en el trabajo o en los círculos sociales. Por ejemplo, quizás ya no pueda hacer las tareas domésticas o tenga que delegar trabajos a sus colegas. ¿Se siente incómodo al pedir ayuda? Recuerde que es importante delegar algunas tareas para poder centrarse en la salud y en el bienestar.
2. Sea flexible
Aunque siga el mismo plan de tratamiento durante semanas o meses, sepa que el cuerpo puede reaccionar de forma diferente de un día para otro. No se frustre si no tiene la misma energía que antes. Sea flexible. Y recuerde que los síntomas pueden aparecer y desaparecer de forma rápida.
Es habitual tener fatiga, náuseas, dolor y otros síntomas que afectan la vida cotidiana. Pero con cambios sencillos en la rutina o en el horario de trabajo puede controlar estos efectos secundarios.
Mantenga también la mente abierta a los recursos que sugiera el equipo de atención médica, como los que se enumeran a continuación:
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Masoterapia
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Yoga y ejercicios de respiración
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Relajación muscular y métodos de visualización
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Asesoramiento nutricional
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Terapia individual o familiar
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Grupos de ayuda
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Terapia ocupacional o fisioterapia
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Acupuntura
3. Sea consciente de los síntomas
No hay forma de evitarlo: el tratamiento contra el cáncer puede causar efectos secundarios. Es natural preocuparse por los efectos secundarios, pero cada persona vive el tratamiento de forma diferente. Algunas personas no tienen muchos efectos secundarios, mientras que otras sí.
Preste atención a cuándo ocurren los síntomas y qué los mejora o empeora. Con esta información, el proveedor de atención médica encontrará la manera más adecuada de tratar los síntomas. Sepa cuándo informar los síntomas al proveedor.
4. Priorice la salud mental
Gran parte de la atención del cáncer se centra en lo físico. Pero también es importante cuidar la salud mental. Una forma de hacerlo es reservar un tiempo cada día para centrarte en la fortaleza interior. Mírese en el espejo y recuérdese todo lo que es capaz de hacer, aunque se sienta triste o cansado.
En los momentos en los que se sienta abrumado, puede ser útil tener un espacio específico al que acudir para desconectarse y relajar. Puede ser un rincón acogedor en el dormitorio, un espacio en la naturaleza o un templo. Asegúrese de que sea un lugar en el que se sienta cómodo y en paz.
Puede ser útil hablar con un consejero. Pida al equipo de atención médica que lo derive si es necesario. También es posible que haya alguien del personal con quien pueda hablar.
5. Anticípese al estrés
El cáncer puede crear mucho estrés en su vida. Pero eso no significa que no pueda hacer nada: hay actividades que puede hacer para controlar el estrés y sentirse mejor en general. Algunas ideas incluyen lo siguiente:
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Comer bien y descansar lo suficiente cada día
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Mover el cuerpo de una forma que lo haga sentirse bien, como dar un paseo o hacer un poco de yoga suave
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Meditar o simplemente hacer respiraciones profundas para relajarse
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Escuchar un podcast o un audiolibro
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Poner música y bailar en la sala de estar
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Hablar con alguien que lo escuche, como un familiar, un amigo, un consejero o un líder espiritual
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Probar un pasatiempo que lo entretenga, como pintar, tejer o armar rompecabezas
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Pasar tiempo en la naturaleza o hacer algo que lo haga sentir conectado con el mundo que lo rodea
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Abrazar a un ser querido o pasar tiempo con personas que lo hagan feliz
Recuerde que cada persona afronta el cáncer a su manera. Así que no hay problema si algunos de estos métodos no le sirven. Lo más importante es encontrar formas de aliviar el estrés y cuidarse. Cada mínima acción es un avance en el camino hacia la recuperación.