Cómo estar saludable antes de la cirugía
Ahora que se programó su cirugía, quizá se pregunte cuál es la mejor forma de prepararse. Es importante que esté lo más sano posible antes de la cirugía. Eso reduce la estadía en el hospital y el tiempo total de sanación. También pueden reducir el riesgo de tener problemas después de la cirugía, como infecciones.
Hable con el proveedor de atención médica sobre hacer los siguientes cambios de salud en el tiempo previo a la cirugía. No importa si tiene unos pocos meses o apenas unos pocos días. Lo que haga ahora puede hacer una diferencia luego.
Sea más activo
La cirugía puede ser desgastante para el cuerpo. Por eso, es bueno que mejore su condición física. Eso puede facilitar el proceso de volver a las actividades diarias después de la cirugía.
No es necesario que empiece una rutina de entrenamiento nueva. En su lugar, intente estar lo más activo que pueda cada día. Pruebe hacer actividades de bajo impacto, como caminar, andar en bicicleta o nadar. Pero hable con el proveedor de atención médica primero para asegurarse de que lo que decida sea seguro en su caso.
En algunos tipos de cirugía, el proveedor de atención médica podría indicarle determinados ejercicios. Hágalos. Pueden fortalecer una parte del cuerpo, como la rodilla o la cadera para un reemplazo de la articulación.
Elija alimentos más saludables
Los alimentos que come pueden mejorar el funcionamiento y la recuperación del cuerpo. Elija opciones nutritivas, como frutas, verduras y granos integrales. Además, elija fuentes saludables de proteína, como pescado, pollo y otras carnes magras. Si le harán una cirugía del corazón, esos cambios en la alimentación pueden mejorar el control de la presión arterial alta o el nivel alto de colesterol. Comer alimentos más saludables también puede ayudarlo a bajar de peso antes de la cirugía, de ser necesario.
Según su estado de salud, el proveedor de atención médica puede recomendar que empiece a tomar suplementos. O quizá le digan que coma más alimentos de determinado tipo para obtener nutrientes vitales, como fibra. Es posible que deba consultar con un nutricionista para obtener más ayuda.
Deje de fumar, si es necesario
Fumar puede afectar el funcionamiento de los pulmones. Eso puede dificultar la respiración después de la cirugía. También aumenta el riesgo de tener un ataque al corazón. Pero dejar de fumar, incluso unos pocos días antes de la cirugía, puede protegerlo de estos problemas. También lo ayudará con lo siguiente:
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Puede acelerar el proceso de recuperación del cuerpo.
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Puede reducir el riesgo de infección.
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Puede acortar la recuperación de la anestesia.
Para aprovechar estos beneficios, hable con el proveedor de atención médica de inmediato sobre cómo dejar el tabaco.
También tome las siguientes medidas
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Baje su nivel de estrés. Estar estresado puede afectar su salud física y mental. Pruebe distintas formas de relajarse, como la meditación o la respiración profunda.
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No fume ni beba alcohol durante, al menos, 24 horas antes de la cirugía.
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Informe al proveedor de atención médica sobre todos los medicamentos que usa. Esto incluye los medicamentos recetados, los productos de venta libre, los medicamentos a base de hierbas y los suplementos.
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Si tiene diabetes, lleve un registro del nivel de azúcar en la sangre. Controlar el nivel de azúcar en la sangre es importante para la recuperación. Es probable que el proveedor de atención médica revise su nivel de azúcar en la sangre antes de la cirugía.
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Planifique para tener un control seguro y eficaz del dolor después de la cirugía. Hable con el cirujano sobre las opciones de control del dolor. Incluyen una combinación de estrategias y métodos alternativos, como visualización guiada y técnicas de relajación.